ISAÍAS Y LA VISIÓN DEL TRONO

053-ISAIAH AND THE THRONE VISIONIsaías fue uno de los profetas más importantes de toda la Biblia. Su libro es uno de los mayores y sus mensajes acerca del Mesías fueron tantos y tan importantes, que hacen que sea considerado el profeta del Evangelio. En una ocasión, Isaías tuvo una visión de Dios realmente impactante. Él vio al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y sus faldas llenaban el Templo. Por encima de él, había ángeles volando que proclamaban a gran voz la Santidad y la Gloria de Dios.1 Isaías dijo que iba a morir puesto que él, siendo pecador de labios inmundos, había visto a Dios, al Rey de los cielos. Uno de los ángeles fue enviado hacia él trayendo en su mano un carbón encendido, tomado del altar con unas tenazas y tocando su boca, le dijo: “He aquí que esto tocó tus labios y es quitada tu culpa y limpio tu pecado”.2

Al menos dos cosas destacan en esta visión. Una, es que existía la noción bíblica de que ningún hombre pecador podía ver a Dios y vivir3; de ahí lo que dijo Isaías. Otra, es que Dios puede santificar y purificar a cualquier persona que lo desee. Ese altar celestial, de donde trajo el ángel el carbón encendido, es el gran original que está en el Santuario Celestial4 y estos elementos descritos, son símbolos que representan los méritos de Cristo, su justicia perfecta y su intercesión por nosotros.5 Esto nos recuerda que la Biblia dice que hay condiciones para poder ver un día a Dios. Por ejemplo: “Seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor”6; “Bienaventurados los de limpio corazón, porque verán a Dios”.7 Job decía que cuando resucitase vería a Dios con sus propios ojos.8 Abrahán, Jacob, Josué, Gedeón, los padres de Sansón y otros declaran haber visto a Dios, pero en la forma de un ángel, el Ángel de Jehová.9 El apóstol Juan confirma que a Dios nadie le ha visto jamás, pero que el unigénito Hijo, él lo ha dado a conocer.10 Jesús mismo dice que quien le ha visto a él, ha visto al Padre.11 Dios tiene todo el poder y puede dar la vida o quitarla, herir o sanar y él capacita a las personas con el don que necesiten para su servicio.12 Isaías comprendió esto y cuando Dios en la visión preguntó a quién enviaría, quién estaría dispuesto a ir por él, Isaías declaró: “Heme aquí, envíame a mí”.13

 

Referencias Bíblicas:

  1. Isaías 6: 1-3
  2. Isaías 6: 5-7
  3. Éxodo 33: 19-20
  4. Hebreos 9: 11, 12
  5. Hebreos 8: 1, 2, 5, 6
  6. Hebreos 12: 14
  7. Mateo 5: 8
  8. Job 19: 26
  9. Génesis 18: 1-5; 32: 24-30; Éxodo 33: 18-23; Josué 5: 13-15; Jueces 6: 22; 13: 22
  10. Juan 1: 18; 1 Juan 4: 12
  11. Juan 14: 9
  12. Deuteronomio 32: 39
  13. Isaías 6: 8