EL SÁBADO

002-THE SABBATHAdemás de los seis días de la creación, Dios nos regaló un día más de 24 horas, el séptimo y último día,1 el sábado. Se dice que Él cesó y descansó de toda su obra creadora, pero no como quien estuviera fatigado, sino satisfecho con los frutos de su sabiduría y bondad y con las manifestaciones de su gloria. Según la Biblia, Dios bendijo el séptimo día, el sábado, y lo santificó, y nos lo dio como señal entre Él y nosotros,2 como un templo o monumento de la Creación en el tiempo. Nos lo dio para que lo guardásemos, porque el sábado fue hecho para el hombre,3 para toda la humanidad. Ése, es el único origen del concepto de semana, los siete días de nuestra Creación.

El sábado es una señal del poder creador y redentor; señala a Dios como fuente de vida y conocimiento; recuerda al hombre la gloria primitiva y así da testimonio del propósito de Dios de volvernos a crear a su imagen. El sábado y la familia fueron instituidos en el Edén, y en el propósito de Dios están indisolublemente unidos. En ese día, más que en cualquier otro, nos es posible vivir la vida del Edén.4 El amor de Dios ha puesto un límite a las exigencias del trabajo. En su día, Dios reserva a la familia la oportunidad de tener comunión con él, con la naturaleza y con su prójimo. Eso mismo dice el cuarto mandamiento de la Ley de Dios,5 y se nos invita a recordar y guardar el sábado, precisamente porque Dios creó los cielos y la tierra en seis días y el séptimo descansó. La Ley de Dios, los diez mandamientos, fueron escritos por el dedo de Dios6 y son para siempre y nunca se han de quitar de ellos ni un punto ni una coma,7 según confirmó el mismo Jesús.

Además, como Jesús fue el Creador de todo, él se declara “Señor del sábado”.8 Jesús guardó también el sábado como día de descanso,9 enseñándonos cómo hacerlo bien,10 de puesta de sol a puesta de sol.11 Él se abstuvo de trabajar en ese día, pero curó enfermedades, predicó y explicó las Sagradas Escrituras en el Templo y en la Sinagoga. Todos los discípulos de Cristo guardaron también como día de reposo el sábado bíblico12 hasta el fin de sus días.13 La Biblia dice que hasta en la Tierra nueva,14 los hijos de Dios acudirán a adorar a Dios en ese día, cada sábado. En la mente de Dios y en su amor por todas sus criaturas, la ley del sábado del cuarto mandamiento contemplaba también el derecho de los animales para tener un merecido descanso, ya que en ese día nadie tenía el derecho de hacerlos trabajar, ni en beneficio propio o para terceras personas a quienes pudieran ser prestados en ese día. Es la primera ley que contempla ese derecho para los animales domésticos que tan duramente han sido explotados por parte del hombre.15

 

Referencias Bíblicas:

  1. Génesis 2: 1-3
  2. Ezequiel 20: 12, 20
  3. Marcos 2: 27
  4. Isaías 58: 13-14
  5. Éxodo 20: 8-11
  6. Éxodo 31: 18
  7. Mateo 5: 17, 18
  8. Marcos 2: 28
  9. Lucas 4: 16, 31
  10. Mateo 12: 9-13
  11. Levítico 23: 32
  12. Lucas 23: 54-56
  13. Hechos 13: 42-44; 16: 12, 13; 17: 2; 18: 4
  14. Isaías 66: 23
  15. Deuteronomio 5: 14